2013
ES
El vídeo “En el lugar de Jorge” tiene, al igual que una pintura, varias capas. Sebastián Riffo, en período electoral, arranca un afiche de una campaña política para utilizarlo como lienzo. Con rapidez (cuatro días) pinta el retrato de un mendigo que, cada día, pide limosna en el Paseo Ahumada. Después dispone al lado del mendigo su “representación pictórica” en plena calle.
El Paseo Ahumada es una vía peatonal ubicada en el centro de la ciudad de Santiago de Chile. Es considerada una de las calles más activas y con mayor flujo comercial del país. Se estima que diariamente transitan más de dos millones de personas, lo que la convierte en una calle propicia para la mendicidad y la exhibición. Riffo cita unas palabras de Enrique Lihn en relación con su obra: “El trabajo se ha convertido en un arte en el Paseo Ahumada y la mendicidad, en un trabajo altamente competitivo”.
La apropiación callejera de la imagen propagandística política, el paisanaje típico de las calles comerciales al cual poca gente presta atención (la “ceguera” de la sociedad), el anonimato de la mendicidad, la locura y la demencia de los vagabundos, o la omnipresencia de la publicidad son los tópicos que se entrecruzan en el vídeo de Sebastián Riffo. Varias preguntas se suscitan. Por ejemplo: ¿Los políticos nos representan? ¿Es la calle un espacio público, privado, o privatizado?
Juan José Santos
Antecedente de esta obra "En el lugar de Roberto" (2008)
"En el lugar de Roberto" (2008) fue la primera vez que coloqué una pintura en el espacio público para ver qué podía suceder. En este primer experimento, tenía más preguntas que respuestas, más dudas que certezas. Solo contaba con la intuición de que la pintura podría generar algo significativo en el entorno urbano de Santiago. Entre los comportamientos que se desencadenaron, el más inesperado fue que las personas que veían la obra empezaron a tomarse fotografías con ella y, por consiguiente, con Roberto. Esto no solo provocaba que le dieran más dinero debido a su condición de mendicidad, sino que también podían verlo y, de esta manera, generar un diálogo que de otra forma no hubiera sido posible.